A finales de los años 60, Nicolás Sánchez, militar de profesión y joyero por devoción, inicia junto con su esposa y su hijo Javier Sánchez Chércoles un negocio de joyería, Joyería Nicol´s, lo que fue el inicio de lo que hoy es Sánchez Vallina Joyeros.
Los comienzos no fueron fáciles y sólo con mucho empeño, imaginación y trabajo se pudo seguir adelante. Ya en el comienzo de los 70 el negocio se trasladó a un local que se había adquirido en la céntrica, aunque no muy comercial, calle Asturias. Es allí donde se inicia la verdadera evolución del negocio con la creación de importantes colecciones de joyería en los mismos talleres que hoy trabajan con nosotros y la representación de importantes casas de alta relojería como Vacheron Constantin, Corum y otras.
Después de un importante esfuerzo Javier adquiere un local en la calle Gil de Jaz de Oviedo, uno de los ejes comerciales más importantes de la ciudad y localización de los más destacados comercios, así como de las firmas más importantes tanto a nivel nacional como internacional. En este local sigue ubicado en la actualidad Sánchez Vallina joyeros.
En 1994 se hacen cargo del negocio Conchita Vallina y sus hijos Javier y Jorge, tercera generación de la familia, quienes comienzan lo que hoy es una larga y reconocida carrera profesional dentro del mundo de la joyería y relojería.